Los beneficios de los masajes reductores son aplicados cuando el cuerpo se somete a un régimen alimenticio. El cual disminuye con el fin de reducir tanto medidas como peso. Y son estos los que más generan cambios en la fisonomía del cuerpo. Sobre todo en ciertas zonas específicas del cuerpo, como el abdomen o las piernas.
Es por ello que conoceremos cuales son esos masajes que más nos pueden ayudar. Así como la manera de realizarlos correctamente. ¡Sigamos leyendo!
Índice
Los masajes reductores. ¿De qué se tratan?
Toda dieta equilibrada o las aplicadas en reducción de peso, lo ideal es que se acompañen de masajes reductores. Así como de ejercicios regulares, los cuales facilitaran el proceso de perdida de grasa. Los masajes reductores es común que se ejecuten con la aplicación de una crema reductora. Se pueden encontrar a base de ingredientes naturales o procesados.
El fin de estos masajes es reducir volumen en zonas específicas del cuerpo, como el abdomen o las piernas. A su vez estos masajes pueden ser combinados con otras técnicas de masajes, como los reafirmantes. Mejoran el estado del cuerpo, reduciendo la celulitis y mejorando la circulación.
Sin embargo, antes de realizar los masajes reductores es importante que la piel se encuentre limpia y exfoliada. Por lo que antes de concertar una cita con una masajista profesional es importante seguir con algunos pasos fundamentales. Y así lograr el efecto tan deseado en el cuerpo.
Pasos a seguir para lograr reducir medidas con masajes
En primer lugar, se deben contar con ciertos implementos básicos como guantes exfoliantes y una crema exfoliadora. Los guantes son básicos para lograr el cometido en la piel. Y la crema se puede hacer con ingredientes que normalmente tenemos en casa. Como miel y azúcar por ejemplo.
Así mismo podemos encontrar cremas con extractos de sal, azúcar, café y distintos tipos e aceites esenciales. Que dan una prestancia mayor a la piel, las cuales se aplican en unas dos sesiones antes de la primera sesión de masajes. Esto con el fin de eliminar células muertas de la piel y que pueda absorber mejor las cremas en el masaje.
Como segundo paso debemos poseer una crema reductora, la cual se puede preparar en casa. O conseguir fácilmente en cualquier herbolario e incluso en farmacias. Podemos poner en práctica nuestras habilidades y hacer nuestra propia crema. A partir de ingredientes naturales que disminuyen las grasas en esas zonas del cuerpo que tanto se requiere.
Forma idónea de aplicación de masajes reductores
Podemos encontrar distintas técnicas, cuando las hacemos por nosotros mismos es bueno tenerlas en cuenta. Sin embargo lo ideal es siempre encontrar una persona que sea profesional. Y que aplique técnicas especializadas. Como los golpeteos, el amasado y la fricción.
El movimiento adecuado es dar en la piel movimientos circulares en el sentido de las agujas del reloj. Y con el pasar de los días realizar aún más presión, así como unas palmadas leves en la zona. Alrededor de unos 20 minutos diarios. Solo con realizar dicha acción bastara para mejorar la condición de la zona. Solo a base de constancia y dedicación se lograran ver resultados.
Así mismo es imprescindible lograr tomar mucha agua, para ayudar en el proceso de eliminación de toxinas. Sumado a la ejecución de ejercicios que ayuden a reducir y bajar el peso del cuerpo. Así como la aplicación de hábitos saludables, como dormir las ocho horas completas.
Los beneficios de los masajes
Su gran aporte es la reducción de grasa en zonas localizadas, así como la pérdida de peso gradual del cuerpo. Son estos los más realizados en el cuerpo con el fin de lograr este cometido. Se trata de la movilización por medio del sistema linfático de toxinas del cuerpo. Es esencial en la aplicación de la medicina estética.
Los masajes reductores son ideales para combatir la flacidez de la piel, así como mejorar la circulación sanguínea. Es un potente reductor de la celulitis, así como ayudar al cuerpo a deshacerse el estreñimiento. Además mejora la textura de la piel y estimulando el sistema linfático a eliminar las toxinas del mismo.