La vitamina K es un complejo liposoluble, la cual se acumula en el tejido adiposo o tejido graso. Ésta es comúnmente llamada la vitamina olvidada, debido a que muchas personas desconocen sus beneficios.
La vitamina K posee una gran cantidad de beneficios al organismo. Ésta actúa, sobre todo, en el flujo arterial y en la formación de los huesos. La podemos encontrar en distintos alimentos, sobre todo los vegetales de hoja verde y en algunas proteínas. También la podemos encontrar en pequeñas cantidades en algunas proteínas. A continuación, vamos a explicar
Es necesaria para la salud arterial
La función de la vitamina K está relacionada directamente con la coagulación de la sangre. Esto se debe a que ésta es un suplemento ideal para evitar los problemas causados por el sangrado. Ésta actúa con un grupo de proteínas, llamadas factores de coagulación, para evitar la pérdida excesiva de sangre.
Debido a esto, un déficit en la vitamina K puede causar un sangrado excesivo, incluso en los cortes más pequeños. Ésta es recomendada, sobre todo, a las mujeres que suelen tener un sangrado abundante durante la menstruación. Por otra parte, esta vitamina también es buena para la formación de glóbulos rojos y evitar problemas de la hemoglobina.
Ayuda en la formación ósea
Durante el proceso de formación de los huesos, es necesario que el organismo posea buenos niveles de vitamina K. Esto es debido a que este suplemento puede ayudar en la absorción de calcio. Es por eso que ésta puede ayudar a prevenir o tratar algunos problemas óseos, como la osteoporosis.
La osteoporosis es una enfermedad que puede causar una debilidad o fallo en la formación de los huesos. Esta condición se presenta, sobre todo, en adultos mayores. Es por eso que es importante ingerir buenas cantidades de vitamina K en edades avanzadas. Además, la ingesta de vitamina D puede complementar esta acción.
La vitamina K protege al corazón
Distintos estudios han demostrado que la vitamina K es sumamente necesaria para salud del corazón. Ésta puede reducir los problemas relacionados con la calcificación de la sangre y las arterias. Además, esta vitamina ayuda con la elasticidad y correcto flujo de las arterias, evitando problemas cardíacos.
La vitamina K es necesaria para evitar las anginas de pecho o incluso infartos de miocardio. Esto se debe que dicha vitamina ayuda en la formación de una proteína conocida como menaquinona. Cuando ésta falla, puede causar problemas en la glándula aorta y las arterias coronarias. Éstas son las principales encargadas de suministrar sangre al corazón. Por lo tanto, un daño en éstas puede contraer problemas y enfermedades graves en el mismo.