La trombofilia es la tendencia a formar coágulos en el torrente sanguíneo, con el consecuente peligro de trombosis venosas, pulmonares o ACV. La trombofilia ocurre en personas por condición hereditaria al faltarle algunas de las enzimas que moderan la coagulación de la sangre. Sin embargo las causas de las trombosis también obedecen a condición genética, obesidad, embarazo, sedentarismo, diabetes, toma de anticonceptivos, u hormonas, cáncer y HIV.
Operando entonces las causas comunes de fabricación de coágulos y la tendencia hereditaria trombofílica, se dispararan cuadros de trombosis. Cuando hay algunos de estos elementos mencionados, suceden eventos de trombo embolismo con peligro para la salud o muerte inminente. La trombofilia incrementa las posibilidades de que se produzcan en un organismo, coágulos intravasculares.
Causas de la trombofilia
Las causas del por qué se produce la trombofilia, son de tipo hereditario primariamente, y puede haber causas adquiridas también. Las genéticas se heredan de padres a hijos y en tercera generación y entre ellas tenemos:
- Deficiencias de los anticoagulantes naturales del cuerpo, como la proteína C, proteína S y la antitrombina.
- Concentración elevada de un aminoácido como la homocisteina.
- Exceso de enzimas del factor VII y fibrinógeno que es precursor de la coagulación.
- Mutaciones de las células sanguíneas, como la mutación V de Leiden.
- Las adquiridas son las que predisponen comúnmente a los coágulos intravasculares. Por ejemplo: obesidad, varices, fracturas de huesos, sedentarismo, embarazo, trastornos cardiacos, infartos, diabetes, presión arterial alta, uso de hormonas o anticonceptivos. Además de estar encamado mucho tiempo por estasis de la sangre, viajar más de 8 horas sentado en un avión. Enfermedades de tipo hiperlipidemia, malaria, sífilis, cáncer, hepatitis, HIV, alzhéimer, lupus y otras autoinmunes como artritis y síndrome anti fosfolípidos.
Síntomas
Los síntomas que puede presentar un paciente con trombofilia dependen del tipo de trombosis consecuente y en que órgano se localice. Por ejemplo puede presentar el paciente dolor en el pecho, disnea abrupta y dificultad para inspirar más rostro cianótico. Todo ello habla de un trombo embolismo pulmonar, cuya conducta salvadora debe ser inmediata y es menester ingresar al paciente en UCI.
Si el paciente presentase dolor agudo profundo en un miembro inferior o pierna, con calor local de la misma y aumento de tamaño. Más sensibilidad al tacto y al apretón de los gemelos, tenemos el cuadro de una trombosis venosa profunda. Es una emergencia también y se debe de consultar para realizar un eco doopler venoso de los miembros inferiores y colocar tratamiento anticoagulante.
Si el paciente presenta dolor precordial o en el pecho, sudoración profusa, palidez, y baja tensión arterial con desvanecimiento, seria un infarto al miocardio. Emergencia por excelencia para acudir de inmediato y dejar en UCI. El paciente que se presenta con pérdida de conciencia, hemiplejia o parálisis de media cara y contralateral al resto del cuerpo. Con caída de una mano o pierna en ese hemicuerpo, describe sin duda a un accidente cerebro vascular, en este caso trombotico. Como es evidente, pueden ocurrir distintos cuadros clínicos y síntomas variados que expliquen una trombosis y trombofilia.
Tratamiento
El tratamiento de la trombofilia es el uso de anticoagulantes por indicación médica y ajuste de dosis de acuerdo a la patología presente. El uso de anticoagulantes puede ser temporal, por ejemplo meses o hasta permanente dependiendo del estado del paciente y patología. Por ejemplo, se pueden dar de manera preventiva y por períodos de tiempo corto, en postoperatorios o en accidentados que requieran estar encamados.
En pacientes con patologías graves o que corran peligro de accidentes cerebrovasculares, o infartos, los cuales suelen repetir. Es dejado el tratamiento anticoagulante de forma permanente con supervisión médica estrecha y realización de pruebas sanguíneas de coagulación para control. Están indicados según el caso los anticoagulantes como la Heparina, Warfarina o el Rivaroxaban. Cobra importancia mantener las enfermedades potencialmente peligrosas para desarrollar coágulos ya mencionadas y los tratamientos hormonales, bajo control. Y no mantenerse mucho rato parado o sentado en circunstancias de viaje, para evitar el estasis sanguíneo.