Cuando se habla de una persona vengativa, se habla de un individuo que posee sentimientos de rencor. Cuando estos sentimientos llegan a materializarse es cuando se habla de que se ha cumplido un hecho de venganza. Ahora bien, cuando estas acciones no se llevan a cabo simplemente quedan los sentimientos y en algún momento podrían llegar a ser superados.
La venganza se trata de una acción hostil que se comete en contra de alguien más y esta puede llegar a sufrir las consecuencias de tal movimiento. A pesar de que son acciones distintas van estrechamente relacionados.
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¿Cuáles son las características de una persona vengativa?
Las personas vengativas son individuos que carecen de empatía hacia los demás, no necesariamente lo desarrollan de forma constante y con todo el mundo. Sin embargo, es un sentimiento que parece al momento de incrementarse la ira. Cuando esta parece la empatía deja de ser un rasgo en este tipo de personalidad.
Son personas con muy poca capacidad para conocerse a sí misma, por lo que al momento de desplegar un sentimiento de ira no son capaces de reconocerlo. Se caracterizan por manejar de mal modo sus emociones, de allí que los sentimientos de venganza se acrecienten. Son poseedores de la verdad absoluta y nada los hace cambiar de parecer.
Tienden a ser individuos intolerantes y muy pocos flexibles, adicionalmente cuando alguien no actúa basándose en lo que ellos dictaminan se tornan agresivos. Seres en extremo cuadrados, todo es blanco o es negro, los grises no son aceptables. Pocas veces llegan a perdonar una acción que los haya herido y adicionalmente nunca la olvidan. Son orgullosos y no son capaces de ver sus propios errores.
La persona vengativa pueden llegar a encontrar satisfacción
Cuando un ser vengativo realiza una acción violenta en contra de otra que siente la ha perjudicado de algún modo. Es común que sienta una gran satisfacción al cometer el acto de venganza. De seguro, no sentirá el menor remordimiento por haber realizado tal hecho.
Ahora bien existe una diferencia entre los actos que se pueden cometer, existen aquellos impulsivos y los otros premeditados. Cuando las accione son impulsivas, la respuesta es inmediata y con ello acontece la satisfacción. Sin embargo, la tensión disminuye y solo queda la molestia.
El problema puede existir cuando la acción se convierte en un hecho premeditado. Este tipo de conducta puede llegar a repetirse de nuevo en el futuro solo por el simple hecho de sentir placer. Existe un cierto nivel de sadismo en este tipo de situaciones, aunque esta no sea siempre la regla.
¿La venganza puede llegar a satisfacer plenamente?
Cuando sucede un hecho de venganza y por ende la persona ha sido agresiva o rencorosa. Se activan ciertos circuitos neuronales que se encuentran asociados al placer. Es común que esta acciones sean realizadas por personas que han sido marginadas en la sociedad o que han presentado algún tipo de patológica neurológica.
