El pie valgo es una afección que sufren miles de personas en todo el mundo, Si no se lo trata puede tener diversas consecuencias en la salud de la persona y causar otros problemas en distintas partes del cuerpo.

El origen de esta alteración en el pie puede ser variable. Pueden ser por una causa muscular, ósea, neurológica, secundaria a patologías sistémicas, idiopático, lo que hace que existan distintos tipos de pie plano.

¿Qué es un pie valgo?

Esta afección se presenta cuando los arcos no se desarrollan adecuadamente durante la etapa de la infancia. Las causas son variadas y puede ser producto también de lesiones o desgastes propios de la edad.

Pie valgo

Se presenta cuando los arcos no se desarrollan adecuadamente

Es un pie en el que el talón mira hacia fuera y se dirige hacia fuera. Los pies valgos son aquellos que orientan la cara plantar hacia el borde externo del pie.

Este padecimiento no causa dolor en la mayoría de los casos, pero puede contribuir a que las personas desarrollen problemas en las rodillas y los tobillos porque se modifica la alineación natural de las piernas.

¿Qué tipos existen?

Pies valgos flexibles: que surgen por herencia familiar. Suele producir dolor y una sobrecarga en los músculos del pie.

Pies rígidos: que ocasionan dolor desde los pies hasta la columna lumbar y suelen limitar el uso y duración del calzado.

¿Cuáles son los síntomas del pie valgo?

Aunque por los general son asintomáticos, en algunas personas se pueden manifestar distritos síntomas:

  • Dolor en el pie, sobre todo en el área del arco y el talón.
  • Las actividades cotidianas agudizan el dolor
  • Hinchazón en el área interna del tobillo.
  • Tendencia a las caídas frecuentes
  • Aplanamiento de los pies
  • Calambres
  • Caminar con cierta torpeza
Pie valgo

es una afección que puede causar problemas futuros

¿Puede prevenirse el pie valgo?

Pueden prevenirse algunos factores de riesgo que provocan este tipo de pie y predisponen a la persona a su padecimiento. Estos son:

  • La obesidad y el incremento del Índice de Masa Corporal
  • La existencia de lesiones en el pie y tobillo
  • Diabetes y envejecimiento

Todos estos son factores que hacen estar más propensos a padecer de pie valgo.

¿Cuál es el tratamiento para el pie de valgo?

En función del tipo de pie valgo y del grado de gravedad de los síntomas variará.

Ortopédico: el médico indicará el uso de plantillas adecuadas que obligarán a que el pie modifique su posición hasta crear un arco en función de la anatomía. A veces se necesitará usar zapatos especiales.

Fisioterapéutico: consiste en ejercicios cuya finalidad será fortalecer la musculatura que estimula la formación natural del arco del pie. Se suele complementar con el uso de plantillas para que sea efectivo.

Quirúrgico: cuando la rehabilitación no resulta efectiva o cuando si el pie está muy inestable se recurrirá a la cirugía, tras la realización de distinto estudios médicos.