El tabaco de liar (aquel que puedes preparar tú mismo) desde hace tiempo está siendo comercializado como orgánico y natural, sin embargo, está comprobado que estos tienen efectos adversos para la salud. Los cigarrillos enrollados a mano se han vuelto cada vez más populares en el Reino Unido en los últimos años. Estos son los productos preferidos por los jóvenes y otros grupos de personas, porque son más baratos que los convencionales hechos en fábrica.
Sin embargo, estudios en varios países, incluido el Reino Unido, han encontrado que las percepciones de quienes los compran afirman que son cigarrillos más naturales y contienen menos aditivos dañinos. Esto los hace más seguros que los hechos en fábrica.
La doctora Fiona Andrews, directora del Instituto de Neumonología en UK, ha desarrollado un estudio y una campaña sobre este tipo de cigarrillos. Concluyó que el 40 por ciento de las personas en la región de Northwest los fumaban. Dijo que los fumadores podrían no mostrarse interesados a los mensajes nacionales para dejar de fumar. Esto debido a que creían que ya estaban reduciendo los daños con estos cigarrillos “más orgánicos”.
Fumador de tabaco de liar y los cigarrillos convencionales
Las personas que fuman cigarrillos de liar parecen verse a sí mismas como un tipo diferente de fumador, y ese no es el caso, muchas personas en el estudio de Andrews habían respondido a encuestas en el área explicando que su preferencia por los “rollies” se basaba en una falta de fundamento. La impresión de estos fumadores es que los cigarrillos de liar eran «orgánicos o naturales». Por otra parte, los fumadores de cigarrillos convencionales ven más cómodo comprarlos. Esto es porque se ahorran el paso de prepararlos, solo debían activar su encendedor y con solo eso bastaba.
El contenido del cigarrillo de liar y el cigarrillo convencional es prácticamente el mismo. Esto quiere decir que las sustancias que causan daños a los pulmones están presentes, por lo que el daño siempre será proporcional a la cantidad de cigarrillos que fume una persona.
Un estudio publicado en la British Medical Journal (BMJ) de la mano del doctor Richard Edwards, quien es profesor en materia de salud pública en la Universidad de Otago en Nueva Zelanda, concluyó que los cigarrillos para enrollar a mano «al menos tan peligrosos como cualquier otro tipo de cigarrillo«. La concentración de aditivos es en realidad más alta en algunos productos de tabaco suelto que en productos convencionales.
Sin embargo, el uso de cigarrillos de liar parece estar en aumento. En el Reino Unido, entre 1990 y 2010, el uso predominante de cigarrillos enrollados a mano entre los fumadores mayores de 16 años aumentó del 2% al 23% entre las mujeres y del 18% al 39% entre los hombres.
Deborah Arnott, directora ejecutiva de la organización benéfica contra el tabaquismo ASH, dijo que el tabaco utilizado para enrollar contenía la misma cantidad de químicos dañinos que un cigarrillo fabricado. «Estos cigarrillos no son saludables y no vas a morir menos rápido si fumas tabaco enrollado a mano», dijo. Discutir sobre la diferencia entre cigarrillos de liar y convencionales es como si se discutiera si es más seguro saltar del piso 20 o 15 de un edificio, de cualquier manera va a causar daño.
