Ante las múltiples decepciones, insatisfacciones y frustraciones que enfrentamos a diario, es muy lógico que los humanos podamos perder la ilusión de vivir, así que debemos volver a ilusionarnos. Se conoce como ilusión de vivir, las metas que cumplir, un proyecto por llevar a cabo o una motivación para hacer las cosas. Esto nos mantiene con ganas de levantarnos a diario con alegría, y deseando salir a las labores con entusiasmo. Además de la emoción por ayudar a los demás y sentirse útil y realizado mientras llega el evento u objetivo planteado.
Por eso es importante mantener y revisar la agenda de nuestra existencia, verle el lado positivo y enriquecedor a la vida. Saber que nos mantenemos con esa vibración de amor por lo que hacemos y lo que nos hemos planteado a futuro. Tener la intención de volver a ilusionarnos, tal cual un niño que espera una navidad, un regalo, o un paseo. Es renovar esa alegría de vivir por algo o alguien y sentirnos imprescindibles, aunque no sea así, para no decaer fácilmente.
Muchas circunstancias pueden afectar nuestra ilusión por las cosas y por la vida. Desde decepciones amorosas, pérdidas de familiares, debacle económico, baja autoestima, desempleo, enfermedades, hábitos nocivos, pero muy frecuentemente la depresión.
¿Cómo podemos volver a ilusionarnos?
Lo primordial es buscar ayuda en el entorno para apoyarnos en amigos o familia. El trabajar en equipo será de gran ayuda para sacarnos de un estado de tristeza y desilusión, y mejor si involucra un terapeuta. Las entrevistas y psicoterapia serán invalorables si la persona está muy enfrascada en la desilusión y negada a salir de ella.
Por otra parte, es primordial replantearse retos, estudiar, cambiar de empleo o casa, un viaje, cuidar la imagen, renovar la espiritualidad etc. El contacto con la naturaleza cobra mucha importancia, apreciando lo bello de la creación, respirando y sintiendo el sol y el aire. Salir a caminar, demostrar algún interés en causas benéficas, animales, por ejemplo, causas reconfortantes y que alimenten el espíritu. Cantar, bailar, darse una buena ducha, comer algo que nos guste, ver una película alegre entre otras.
Se trata de integrar tantas dinámicas como sean de nuestro agrado y que despejen la mente de situaciones y pensamientos negativos. Ello nos dará las pautas para poder reencontrar la felicidad, animo e ilusión por seguir adelante.
Frases motivadoras
Dentro de las estrategias que se pueden ejercer para elevarnos de la desilusión, está la de leer algunas frases motivadoras. Entre ellas las siguientes:
- Cree en ti mismo.
- Los mejores tiempos están por venir.
- La vida te deparara alegrías.
- Sé tu mejor amigo.
- La paz sea contigo.
- Sonríe, la vida es bella.
- Sé feliz, es gratis.
- Los amigos son los hermanos que la vida nos dio.
- El sol sale para todos.
- Bendice tu camino.
- Siempre se puede comenzar de nuevo.
- Eres un ser único e irrepetible.
- Eres un ser de luz.
- Valórate y quiérete más.
