Los fibromas uterinos o también llamados leiomiomas o miomas, son bultos no cancerígenos que crecen dentro de las paredes del útero. Los mismos aparecen con mucha frecuencia en el sistema reproductivo femenino. Además, pueden variar de tamaño. Existen fibromas grandes que son notorios físicamente, y otros tan pequeños que se vuelven difíciles de detectar. Aunque cabe destacar, que muchas mujeres pueden padecer o haber padecido de fibromas sin haberlo notado pues generalmente no causan síntomas. Generalmente, suelen presentarse en mujeres entre los 30 y 40 años de edad independientemente si son madres o no. Por esa razón, te contamos todo sobre los tratamientos a los fibromas uterinos.
Índice
Tipos de fibromas uterinos
Existen tres diferentes tipos de fibromas uterinos, estos son:
Fibromas submucosos: Este tipo de fibroma comúnmente, es el principal causantes del sangrado abundante. Crece en la cavidad interna del útero. También causa problemas de fertilidad.
Fibromas intramurales: Este tipo de fibroma se desarrolla en la pared uterina y busca expandirse, haciendo que el útero se sienta más grande. Incluso, puede ser notorio por el crecimiento del abdomen.
Fibromas subserosos: Se forma en la parte externa del útero. Por su tamaño, suele ejercer presión en la vejiga, provocando ganas continuas de orinar. Igualmente, puede presionar el recto causando estreñimiento.
Tratamientos a los fibromas uterinos
Los tratamientos a los fibromas uterinos pueden ser, médicos, quirúrgicos y radiológicos. Sin embrago, el especialista antes de determinar cualquier tratamiento debe tomar en cuenta varias características en la paciente. Por ejemplo su edad, ubicación, tipo y tamaño de los fibromas e igualmente su estado de salud en general.
Si el tratamiento es médico se recomendarán:
Analgésicos que ayudarán a los dolores leves u ocasionales que ocasionan los fibromas. Asimismo, píldoras anticonceptivas o algún otro anticonceptivo hormonal considerado por el especialista. También, se recomienda dispositivos intrauterinos ya que controlan el sangrado y minimizan el dolor causado. Se debe tener en cuenta que estos tratamientos son solo para aliviar los síntomas temporales, y al momento de detener el tratamiento estos pueden reaparecer.
Si el tratamiento es quirúrgico se recomendará:
- Ablación endometrial: Destruye el revestimiento del útero.
- Miomectomía: No toca las partes sanas, solo extirpa los fibromas.
- Histerectomía: Se extirpa todo o parte del útero.
Si el tratamiento es radiológico se recomendará:
- La embolización de fibromas uterinos: Con este procedimiento se corta el suministro de sangre a los fibromas.
- Ultrasonido guiado por imágenes de resonancia magnética: Destruye los fibromas mediante un ultrasonido.
Recomendaciones generales
Se debe recordar, que el sobrepeso es un mal acompañante para nuestra salud. Por lo tanto, ten en cuenta que perder unos kilos te ayudará a reducir el tamaño de los fibromas e incluso evitarlos. Una sana alimentación, también va de la mano para disminuir el riesgo de fibromas uterinos. Así que, no olvides incluir en tu dieta diaria, alimentos ricos en fibra, frutas, vegetales, vitaminas. Incluso, suplementos con altas cantidades de fósforo, magnesio y calcio.