Planificar Una Dieta Equilibrada

La palabra dieta esta relacionada con el hecho de evitar ciertos alimentos o directamente no ingerir ninguno para bajar de peso o mantener el peso estable. Pero la dieta es, en realidad, como se le llama a la totalidad de lo que comemos y los nutrientes que obtenemos de estos alimentos, es hora de que aprendas a planificar una dieta equilibrada.

El ingerir alimentos de manera arbitraria puede no llegar a cumplir con las necesidades nutricionales del organismo, por esa razón es recomendable tener un control en lo que se come y las cantidades en las que se come, conociéndose a esto como equilibrar la dieta.

Te invitamos a seguir leyendo este artículo para que aprendas las características que debe tener una dieta equilibrada, de esa forma podrás diseñar una por tus propios medios en base a tus gustos y preferencias.

Qué es una Dieta Equilibrada

Una dieta equilibrada es, en pocas palabras, el comer sano y de forma variada.

No es necesario evitar la ingesta de ningún alimento, solo se requiere que organices tu dieta de forma que tu organismo se nutra y pueda trabajar en buenas condiciones.

Nutrientes Necesarios

Para poder mantener una dieta equilibrada debes tener en cuenta los nutrientes que la conforman, siendo estos:

• Carbohidratos, representan del 55 a 65% de la dieta, nos aportan energía y los encontramos en cereales y legumbres.
• Grasas buenas, representan del 25 a 30% de la una dieta equilibrada. Estas son las grasas insaturadas que podemos encontrar en ingredientes como el aceite de oliva y los frutos secos.
• Proteínas, representan del 10 a 15% de la dieta y las encontramos en las carnes, pescados y lácteos. También se pueden obtener de las legumbres, pasando a llamarse proteínas vegetales.

Frutas y verduras, complementan la dieta aportando vitaminas y minerales varios, además, son ricas en agua.

Distribuir los Nutrientes a lo largo del día

Para poder mantenernos activos y enérgicos durante el día, debemos empezar este con muchos nutrientes, pero en las noches al nuestro organismo preparase para el descanso las necesidades biológicas son menores.

Existe un dicho que ejemplifica perfectamente este punto de una dieta equilibrada, “Desayuna como rey, come como príncipe y cena como mendigo”.

Te recomendamos distribuir tu alimentación diaria en 5 comidas, un desayuno rico en hidratos acompañado de frutas, verduras y pocas proteínas.

Una merienda de frutas a media mañana, un almuerzo rico en proteínas acompañado de verduras y pocos hidratos. Otra merienda de frutas a mediados de la tarde y una cena ligera de vegetales acompañada de proteínas, evitando los hidratos.

Cantidad de consumo a la semana

Debido a su aporte energético algunos alimentos deben ingerirse a diario, mientras que otros a lo largo de la semana.

Esto te recomendamos realizarlo de la siguiente manera:

• Lácteos: 2 o 3 raciones diarias.
• Carnes: 3 o 4 raciones semanales.
• Pescados: 2 o 3 raciones semanales.
• Huevos: 3 o 4 raciones semanales.
• Legumbres y frutos secos: 4 o 5 raciones semanales.
• Vegetales: 3 a 5 raciones diarias.
• Frutas: 2 a 4 raciones diarias.
• Carbohidratos: 4 a 8 raciones diarias.

Complementando todos estos alimentos con 2 litros de agua al día.

Así ayudas a mantener tu cuerpo hidratado y en buen funcionamiento.

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