Existen múltiples y variadas enfermedades que padecen los seres humanos dentro de las cuales se encuentran la esclerodermia. Cuyo origen etimológico se traduce como “piel endurecida”. Es una enfermedad auto inmune, que afecta los tejidos de la piel. También, afecta las grasas naturales que poseen la piel, los músculos y los huesos. Aunado a diversas complicaciones intestinales, gástricas, de corazón, etc. Para algunos, es considerada como una enfermedad rara que pocas personas padecen. Puesto que, se origina cuando en el sistema inmunitario se produce un error que destruye los tejidos sanos del cuerpo. A continuación, te contamos más detalles al respecto.
¿Cómo se origina?
Su procedencia aún no ha sido esclarecida, pero sí se afirma que es de origen heterogéneo en lo que a trastornos fibrosantes se refiere. La ciencia médica ha logrado avanzar al respecto, aplicando técnicas de índole molecular en la esclerosis sistémica. Muchas teorías coinciden que esta enfermedad se presenta entre los 30 y los 50 años de edad, más en mujeres que en hombres. Existen unos factores que marcan significativamente sus indicios y son los elementos ambientales. Los cuales de manera lógica, pueden ser asociados a sus síntomas.
Esta enfermedad se presenta entre los 30 y los 50 años de edad, más en mujeres que en hombres.
¿Cuáles son sus síntomas?
La sintomatología más común en esta enfermedad, se puede percibir por el enrojecimiento de las manos, conocido como fenómeno de Raynaud. Este síntoma, es producido por una crisis vascular que surge como respuesta al frío. En ocasiones, se considera como una posible alerta a padecer la enfermedad. Otro de sus síntomas tiene lugar en las afectaciones cutáneas. En las que destacan el endurecimiento de la piel, en especial en las manos y dedos.
La sintomatología más común en esta enfermedad, se puede percibir por el enrojecimiento de las manos.
Cuando los síntomas avanzan, hay situaciones difíciles de atravesar en esta enfermedad de origen dudoso o desconocido. Y es que tiene un alto porcentaje de mortalidad y una calidad de vida mínima. Sobre todo, desde el punto de vista emocional. Los cambios físicos deprimen a las personas que la padecen y sus conflictos sexuales se deben a la difusión que se les presenta. Tienen dificultades para realizar cualquier tipo de actividad que implique movimientos tales como: comer, defecar, etc.
Tratamiento de la esclerodermia
En mucho de los casos, los tratamientos para este tipo de enfermedades raras o poco frecuentes son desconocidos así como su origen. Sin embargo, se puede poner en práctica uno en función de los órganos que afecte en particular. A nivel farmacológico, se pueden utilizar vasodilatadores que combatan el enrojecimiento de las manos. Es decir, inmuno-supresores para que el organismo reconozca esa rareza biológica del organismo. También, se aplican antibióticos que ayuden a evadir las temperaturas que afectan otras partes de la piel.
A nivel farmacológico, se pueden utilizar vasodilatadores que combatan el enrojecimiento de las manos.
Ir al médico, permite asumir con mayor responsabilidad los riesgos, permitiendo así minimizar el avance de la enfermedad. El hecho de no existir un medicamento específico o idóneo para ella, no implica que no se pueda hacer nada. Pero los medicamentos comunes para el dolor o ardor en la piel, mitigan las dolencias que en ocasiones se presentan.
