Todo lo que necesitas saber de la Artrosis!

La artrosis es una enfermedad degenerativa que afecta los cartílagos de las articulaciones, causando dolor y rigidez en éstas.

Las articulaciones son las que permiten el movimiento del cuerpo, por lo que la artrosis dificulta dicha acción. Esto se debe al daño producido en la unión de los huesos de los brazos, cuello, rodillas y columna vertebral. Cuando esta enfermedad empeora, el paciente puede incluso perder la movilidad en su cuerpo. Debido a esto, vamos a hablar sobre las causas y los mejores tratamientos para poder combatir esta condición.

Síntomas de la artrosis

La artrosis se caracteriza por ser el desgaste o la eventual rotura de los cartílagos de las articulaciones. Es por eso que los síntomas hacen su aparición de forma progresiva. El síntoma más común es el dolor cuando se realiza un gran esfuerzo o un movimiento articular. Cuando la enfermedad se hace más grave, el dolor puede presentarse incluso cuando la persona se encuentre en estado de reposo.

Los pacientes que sufren de artrosis también presentan hinchazón y dificultad de movimiento en las áreas de las articulaciones. Cuando la enfermedad evoluciona, es probable que la articulación se atrofie y su movilidad sea mucho más complicada.

Factores de riesgo para padecer artrosis

La artrosis es una condición común en personas mayores de 60 años. Esto se debe a que las articulaciones de las extremidades se desgastan con el paso del tiempo. Además, las personas que sufren de obesidad también tienen un alto riesgo de sufrir de esta enfermedad. El aumento de peso puede producir una sobrecarga en la columna vertebral y las rodillas, causando daños en las mismas.

Las personas que suelen realizar actividades físicas mucho tiempo también pueden desarrollar la artrosis eventualmente. Además, aquellos trabajadores que deben cargar con distintos materiales pesados pueden desarrollar esta enfermedad. Por último, es importante saber que existe cierta predisposición genética para desarrollar este trastorno, así como ocurre con muchos otros.

Causas de lesión articular

Hoy en día, no se sabe con certeza qué es lo que puede originar la artrosis en las articulaciones. Se conoce que no es una enfermedad hereditaria, aunque si hay cierta predisposición genética a que aparezca. Es posible que una persona vaya desarrollando esta enfermedad desde edades tempranas, sin siquiera saberlo.

Existen algunas enfermedades que pueden ser causantes de la artrosis. Por ejemplo, las personas que sufren de diabetes, gota o hipotiroidismo poseen alta probabilidad de contraer esta enfermedad. Algunos traumatismos o lesiones en las articulaciones también pueden hacer que la artrosis se origine en éstas.

Tipos de artrosis

Muchos médicos deciden catalogar la artrosis según el lugar donde se originó. Sin embargo, hay otras fuentes que han decidido dividir esta enfermedad en dos tipos: Primaria y Secundaria.

La artrosis Primaria es de tipo idiopática; es decir, aquella cuyas causas no son conocidas. La predisposición genética y el desgaste producido por la edad entran en este tipo de condición.

Por otra parte, la artrosis Secundaria es aquella cuyo origen es conocido. En este tipo de enfermedad entra el daño producido a los cartílagos por algún traumatismo o lesión. También puede ser causado por alguna enfermedad congénita, de metabolismo, o endocrina. Algunas inflamaciones neurológicas también entran en este tipo de categoría de la artrosis.

Diagnóstico de la artrosis

La mejor forma de detectar si una persona sufre de artrosis es realizando una radiografía a la zona afectada. De esta manera, el médico puede detectar si existe algún daño a los cartílagos o una deformación en los huesos. También es importante realizar una exploración física, para descubrir alguna anomalía articular o zonas en las que el paciente presente dolor.

Las resonancias magnéticas y las ecografías también son efectivas para detectar el lugar de origen de la artrosis. Estos exámenes no sólo son utilizados para poder detectar el lugar o la condición del desgaste de los cartílagos. En caso de realizarse alguna de esas pruebas, el médico también podrá detectar alguna otra condición que pueda existir.

Tratamientos de la artrosis

El tratamiento más común para combatir la artrosis es a través del uso de fármacos o analgésicos. La mejor forma de aliviar esta enfermedad es tratando de hacer desaparecer el dolor y la inflamación de las articulaciones. Para eso, es necesario suministrar algunos antiinflamatorios, que pueden ser suministrados de forma intravenosa o a través de tratamientos tópicos.

También existen algunos ejercicios fisioterapéuticos de rehabilitación, para mejorar la movilidad articular y aliviar los síntomas de la artrosis. Algunas dietas y ejercicios son necesarios para reducir el peso del paciente, para evitar la aparición de esta enfermedad. En casos en que la enfermedad se encuentre en una etapa avanzada, es necesario recurrir a la cirugía.

¿Cómo prevenir la artrosis?

Es importante mantener una vida saludable para prevenir una gran cantidad de enfermedades. Para prevenir la aparición de la artrosis, es importante que el paciente controle su peso y haga ejercicio constantemente. Esto puede evitar que los cartílagos de las articulaciones sufran daños, por lo que no padecerán más de los dolores producidos.

Por otra parte, una buena dieta o una alimentación saludable también son grandes contribuyentes para prevenir la artrosis. Algunas grasas pueden causar la degradación de los cartílagos, mientras que un correcto metabolismo puede ayudar a reforzarlos. Además, una buena rutina de sueño ayuda a mejorar la salud de forma impresionante.

Complicaciones de la artrosis

La mayor complicación que puede suceder para las personas que sufren de artrosis es la imposibilidad del movimiento articular. El dolor producido por el desgaste de los cartílagos puede hacer que un individuo no pueda mover sus extremidades. Debido a esto, el paciente que sufra de esta condición tendrá limitaciones para caminar o incluso levantarse.

Además, el daño en los nervios de la columna vertebral puede contribuir a la aparición de algunas condiciones neurológicas. Las personas que sufren de artrosis también suelen experimentar mareos, vértigo o incluso alteraciones en la vista y audición. Por otra parte, el dolor ocasionado por esta enfermedad puede hacer que el individuo tenga problemas para dormir. Esto hace que algunos pacientes que padecen de este síntoma de la artrosis experimenten ansiedad o depresión.