Dermatitis atópica y remedios

La dermatitis atópica es una de las enfermedades de la piel, más comunes y que padecen miles de personas en el mundo. Lo interesante es que estos trastornos pueden tratarse con fármacos, recetados por el médico, o mediante tratamientos naturales.

Afecta sobre todo durante la infancia y las causas pueden ser muy variadas y resulta muy difícil determinar qué la produce.

¿Qué es la dermatitis atópica?

Es cada vez más frecuente y afecta tanto a niños como a adultos. Es clave cuidar la piel atópica, incluso cuando no hay síntomas, es clave para alejar nuevos brotes.

Suele ser duradera, es decir que se presenta como una afección crónica y puede exacerbarse periódicamente. Lo peligroso además es que se puede manifestar junto con asma o con rinitis alérgica.

Existen distintos tratamientos para aliviar los síntomas, pero no se ha encontrado una cura hasta el momento. Los los tratamientos y las medidas de cuidado personal pueden aliviar la picazón y prevenir nuevos brotes.

¿Cuáles son sus síntomas?

Los principales síntomas son:

• Piel seca
• Piel en carne viva que puede infectarse si se rasca
• Picazón que puede ser grave durante la noche
• Manchas de color rojo a marrón grisáceo, que afecta a pies, tobillos, muñecas, cuello, parte superior del pecho, párpados, parte interna de los codos y las rodillas.
• Pequeños bultos que pueden perder líquido y cubrirse con una costra al rascarse
• Piel engrosada, agrietada, escamosa

¿Qué remedios hay para la dermatitis atópica?

Los corticosteroides tópicos, que se aplican sobre la piel, son medicinas usadas para tratar afecciones donde la piel se vuelve roja, inflamada o adolorida. El médico podrá recetarle corticosteroides tópicos que ayudarán a «aliviar» a su piel cuando está irritada.

Además, se puede indicar una crema protectora de reparación. Estas ayudan a reponer la superficie normal de la piel y ayudan a reconstruir la barrera rota.

Remedios naturales

Además de los fármacos indicados por el médico, también existen remedios naturales que pueden aliviar los síntomas de la dermatitis atópica. Entre ellos destacamos:

Bardana: se utiliza para tratar los problemas de las pieles sensibles y reactivas. Actúa sobre los riñones y el sistema linfático, realizando una acción depurativa que elimina toxinas de la dermis.

Cúrcuma: se la usa por sus propiedades antiinflamatorias. También ayuda al hígado a depurar sustancias que alteran la piel. Es adecuada en caso de eczemas o dermatitis, e incluso en trastornos más serios como la psoriasis.

Fumaria: una planta que estimula la depuración hepática y facilita su eliminación a través de los riñones.

Alfalfa: una de las más completas pro su contenido de nutrientes (vitaminas, minerales, etc.), por lo que mejora el aspecto y la vitalidad de la dermis. También es depurativa del organismo.

Aceite de borraja: muy adecuada para las personas que sufren de piel atópica o hipersensible. Sus semillas reducen la inflamación en trastornos de la dermis.

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