Miles de adolescentes en todo el mundo son perseguidos por la pesadilla del acné que aparece en su rostro y que suele deprimirlos y bajarla la autoestima. Pero el acné afecta a personas de todas las edades y puede producir consecuencias en nuestra salud.
Esta enfermedad aparece por una cuestión hormonal y es necesario determinar la causa concreta en cada caso para poder tratarse.
Índice
¿Cuáles son las causas del acné?
Es un trastorno de la piel que ocurre cuando los folículos pilosos se tapan con grasa y células cutáneas muertas. Por esta situación pueden aparecer puntos negros o granos que se notan en distintas partes del cuerpo.
Aunque los más visibles se encuentran en la cara, también aparecen en la frente, el pecho, la parte superior de la espalda y los hombros. Es más, frecuente en los adolescentes pero puede aparecer en todas las edades.
¿Cuáles son las causas?
Una de la principal es que se infectan los folículos de pelo. Se observan mucho más en la pubertad porque los niveles de hormonas de sexo comienzan a subir.
Durante la adolescencia las glándulas sebáceas fabrican la cantidad adecuada de sebo. Pero cuando el cuerpo empieza a madurar, las hormonas estimulan a las glándulas sebáceas para que fabriquen más sebo y estas pueden volverse hiperactivas.
Entonces la ecuación se complica porque habrá un exceso de sebo y demasiadas células dérmicas muertas, los poros se obstruyen. Así las bacterias suelen quedar atrapadas dentro de los poros y reproducirse, haciendo que la piel se hinche y enrojezca, y aparezca el acné.
¿Qué factores aumentan el riesgo del acné?
- Edad, sobre todo en la adolescencia
- Herencia familiar
- Piel aceitosa
- Cambios hormonales
- Desordenes hormonales
¿Cómo se trata el acné?
El acné, cuando no puede evitarse, debe tratarse con el uso de productos tópicos como lociones de limpieza de la piel o cremas que impiden la formación de lesiones.
También son efectivos el uso de ácido retinoico, el ácido salicílico, el adapaleno o el peróxido de benzoilo , prescritos por el dermatólogo, y pueden ser comprados o preparados en farmacias.
El médico observará el acné en cada caso y cuando este es resistente podrá recetar antibióticos como Tetraciclina o Eritromicina, o, en último caso, el uso de la Isotretinoína.
En ocasiones, determinados por el dermatólogo, también se pueden recomendar técnicas de radiofrecuencia, fototerapia con luces especiales, láser y luz pulsada. Todas ellas resultan de mucha utilidad para desinflamar la región en la que se encuentra el acné.