Seguro has escuchado hablar del ácido oleico pero no tienes noción de qué se trata, dónde puede encontrarse y lo bueno que resulta para la salud.
Estudios médicos revelaron que la ingesta de alimentos ricos en ácido oleico está ligada con un nivel más bajo de incidencia de enfermedades cardiovasculares, si lo comparamos con el consumo de otros tipos de grasa.
Índice
¿Qué es el ácido oleico?
Es un ácido graso de cadena larga y que está presente en gran parte de los alimentos grasos que comemos habitualmente. En ellos se presenta en forma de triglicéridos, de ésteres de colesterol y/o de fosfolípidos.
Por ejemplo, el aceite de oliva contiene una buena proporción de este ácido graso. Otros alimentos ricos en este aceite son: aceite de canola, aceite de girasol alto en oleico, grasa de cerdo, aguacate y los frutos secos, entre otros.
¿Cuáles son los usos del ácido oleico?
Es es una sustancia líquida oleosa e incolora, que se oxida cuando entra en contacto con el aire. Lo interesante es que no solo se utiliza en la alimentación, sino que también se lo utiliza para el cuidado personal y la limpieza.
Si se lo agrega en una dieta equilibrada, sus beneficios son:
- Reduce el colesterol malo LDL
- Disminuye la presión arterial y los niveles de triglicéridos en la sangre
- Mejora la salud cardiovascular
- Es agente protector frente a la artritis reumatoide
- Ayuda a subir las defensas del organismo
- Tiene efectos beneficiosos sobre la salud hepática
- Mejora la capa protectora de las neuronas y los nervios del cerebro.
- Es ideal para el mantenimiento del peso corporal, porque interviene en la regulación metabólica de los lípidos.
Otros usos
También se lo utiliza para elaborar diversos productos, principalmente farmacéuticos, textiles, metalúrgicas y químicos.
Es una sustancia de gran funcionalidad y utilidad que se aplica en varias industrias. Por ejemplo, este ácido y su componente de sal de sodio son usados para la fabricación de jabones y detergentes.
¿El ácido oleico tiene contraindicaciones?
Los médicos recomiendan que se consuma en su justa medida. Lo ideal son dos cucharadas diarias para cumplir con los requerimientos del cuerpo. Si se lo consume en exceso puede causar acumulación de lípidos en el hígado.
Algunos controvertidos estudios también han establecido una relación entre el consumo de distintos tipos de grasas y el riesgo de cáncer de mama, pero este tema es de discusión permanente en la comunidad médica-científica.