Vértigos: causas, síntomas y tratamientos

Personas en todo el mundo sufren de vértigo y no saben explicar exactamente esta extraña sensación que puede aparecer en los momentos más inesperados.

Muchos quedan paralizados ante el vértigo y otras personas lo suelen confundir con mareos. Pero lo cierto que existen más de 300 causas que pueden generar esta sensación y resulta muy frecuente en mujeres mayores de 50 años.

¿Qué es el vértigo?

Es una sensación ficticia, más bien subjetiva, generalmente de tipo rotatorio de desplazamiento del cuerpo o de los objetos situados a su alrededor.

Hay que diferenciarlo del mareo, que responde más a una sensación de inseguridad e inestabilidad, algo parecido a la ebriedad. En tanto el vértigo provoca en el paciente una impresión de movimiento o giro, que puede ser pasajera, durar horas o incluso días.

Se suele relacionar en la mayor parte de los casos con una alteración del sistema vestibular, que se halla dentro del oído interno y coordina el mantenimiento del equilibrio, así como de nuestra postura.

¿Cuáles son las causas?

Como indicamos existen cerca de 300 causas que podrían generar vértigo, pero aquí enumeraremos las más frecuentes. Entre ellas destacamos:

Alteraciones: que se producen en la conexión nerviosa del oído al cerebro o en el propio cerebro.

Enfermedad de Ménière: cuyas causas no son claras para la ciencia médica y que produce crisis de vértigo repentinas y episódicas.

Mareos: personas con oído interno sensible a movimientos súbitos, como los vaivenes.

Infecciones: ya sea víricas o bacterianas que afecten al oído interno.

Presión arterial: se da en personas mayores que toman fármacos para controlar una enfermedad cardiaca o la hipertensión.

Trastornos neurológicos: en casos de esclerosis múltiple, fracturas de cráneo, tumores como los que se desarrollan en la base del cerebro o cerca de éste.

¿Cuáles los síntomas?

Los más frecuentes son:

Sensación de que el cuarto donde se encuentra la persona está girando

• Zumbido de oídos
• Hipoacusia en un oído
• Pérdida del equilibrio
• Mareos
• Debilidad de las extremidades
• Dificultad para enfocar con los ojos
• Visión doble
• Parálisis facial
• Dificultad en la articulación del lenguaje

¿Existen tratamientos para el vértigo?

El tratamiento dependerá de las causas que lo producen. Se suele tratar con:

Fármacos: que se indica de manera personalizada a cada paciente. Entre ellos están los diuréticos, ya que al eliminar agua se reduce la cantidad existente en el oído interno y con ello la sensación de vértigo. También se receta la betahistina, un fármaco que reduce la excitabilidad de las neuronas vestibulares.

Se debe tener en cuenta que estos fármacos se deben emplear en dosis bajas al principio del tratamiento del vértigo para, posteriormente, ir incrementando paulatinamente.

En tanto si el paciente padece de la enfermedad de Ménière se trata con una combinación de una dieta hiposódica, es decir baja en sal, junto a la restricción de alcohol y nicotina, y la administración de diuréticos.

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