Los ojos de pollo o heloma interdigitales son callos alojados en sitios de presión donde hay punto óseo, debido a esto suelen aparecer entre los dedos, en la punta o en el dorso. Además son frecuentes en la planta del pie, en la prominencia ósea de los juanetes y debajo de las uñas. Es hora de aprender a tratar los «ojos de pollo» o heloma interdigital.
Índice
7 Remedios para combatir el heloma interdigital
1) El ajo
Este tratamiento consiste en tomar una tirita y hacerle un corte en el centro con una tijera justo del tamaño del ojo de pollo.
Se debe colocar esta tirita sobre el callo haciendo coincidir el agujero con el ojo de pollo, posteriormente colocarás un poco de ajo machacado y se le añade aceite de ricino.
Luego de aplicar la pasta debes de tomar otra tirita y colocarla en un ángulo de 90 grados sobre la otra de tal manera que queden cruzadas para que la aplicación no se mueva y afecte diariamente al problema.
2) La sal para los «ojos de pollo»
Debes de colocar sal en un recipiente de agua fría y sumergir los pies durante unos 20 minutos. Gracias a esto el callo se ablandará y te permitirá usar la piedra pómez. Sin embargo tienes que tener cuidado a la hora de emplear la piedra pómez ya que puedes hacerte más daño si el callo no está lo suficientemente blando
3) Las exfoliaciones
Gracias a una buena exfoliación, hecha por un podólogo profesional te servirá para calmar el dolor de forma indolora. La exfoliación calma prácticamente de forma inmediata, causando que podamos utilizar calzados con comodidad
Teniendo en cuenta que los resultados de este tratamiento no son permanentes y sus síntomas volverán con el tiempo, por lo que tendrás que repetir unas dos o tres veces al año.
4) El plátano
Aplique sobre el ojo de pollo una cáscara de plátano con la parte inferior sobre la piel. Deberás de envolver con una venda y deja actuar durante toda la noche. Retira y desecha la cascara. Repite el proceso una noche más. Además puedes remojar el pie en un recipiente con agua caliente y frote el ojo de pollo con una piedra pómez hasta suavizar el pie.
5) Vinagre con agua contra los callos
Los ojos de pollo se pueden tratar bañando los pies durante 10 minutos en una solución de un tercio de vinagre en dos tercios de agua caliente.
6) El Limón
En este tratamiento deberás de cortar un cuarto de rodaja de limón, con corteza. Colocar el trozo de limón sobre una tirita adhesiva (banditas o curitas). Usar el trozo de limón sujeto y tapado por la curita sobre el ojo de pollo. Se recomienda repetir este procedimiento durante nueve días.
7) Los apósitos para los pies
Este tratamiento se basa en que los apósitos alivian el dolor y la presión que causan los callos al crear un efecto almohadilla sobre la zona afectada. Debes de tener en cuenta que estos apósitos solo actúan de forma temporal, sin extirpar el callo.
Los apósitos empleados en este tratamiento son de fácil conseguir ya que los puedes comprar en cualquier farmacia.