Legionella: causas y prevención

La legionella es una condición que ataca las vías respiratorias ocasionando una posible neumonía. Esta enfermedad se origina por la instalación de la bacteria Legionella pneumophila la cual puede causar una infección o presentarse como un síndrome febril agudo. Si no es atendida a tiempo puede complicarse e ir debilitando los pulmones hasta ocasionar insuficiencia respiratoria.

Es una enfermedad que se desarrolla en cualquier parte del mundo, sin embargo, esta bacteria está presente en mayor medida en ríos, lagos y lugares donde el agua se estanque. Las épocas para su proliferación son en especial es en verano y otoño debido al aumento de las temperaturas.

La forma mediante la cual se transmite con mayor facilidad es por vía aérea mediante sistemas como el aire acondicionado, humificadores o sistemas de calentamiento. Así mismo es común que aguas que hayan estado estancadas y se usen para el riego crean el espacio perfecto para convertirse en un contaminante.

Causas comunes de infección por Legionella

La contaminación con esta bacteria se puede deber a dos exposiciones fundamentales. Una de ellas es mediante el ambiente comunitario y la otra en el sistema hospitalario. Para ambas situaciones la bacteria se encuentra asociada a las condiciones de la infraestructura. Así como, los casos de brotes  relacionados con la estación.

Es común que esta bacteria prolifere en lugares como los depósitos de agua, por lo que al vaporizarla puede trasladarse por el ambiente. Tal es el caso de los sistemas de enfriamiento de los edificios o el riego a los jardines y ambientes húmedos en la comunidad. Incluso una ducha de vapor podría causar tal consecuencia.

Es importante tomar en cuenta que esta bacteria no se transmite entre personas por lo que el contacto con un individuo que se encuentre enfermo no será causa para padecerla en adelante.

Una de sus especies la L. pneumophila la cuales se encuentra comúnmente en aguas dulce alrededor del mundo es una de las más fuertes y agresivas. Aunque también puede desarrollarse con facilidad en estancamientos de aguas dulces artificiales.

¿Cómo podemos prevenir la contaminación con esta bacteria?

Es prudencial que las instalaciones artificiales en las cuales el agua se estanca con facilidad se encuentren mantenidas de forma adecuada. Por lo que la limpieza y desinfección de estas zonas son vitales para evitar este tipo de bacterias.

Cuando se trata de los cuidados en el hogar al emplear sistemas de filtración de las aguas es importante hacer una desinfección continua de los mismos. Siempre es bueno preferir las duchas de gotas gruesas a los difusores más finos en las duchas ya que con el tiempo acumulan más residuos.

Con respecto a los sistemas de enfriamiento instalados para las casas es común que la legionella no prolifere debido a que estos no contienen depósitos de agua. Caso contrario sucede en las instalaciones comerciales, a los cuales si se les debe suministrar un mantenimiento periódico.

Finalmente, se pueden acudir a las instituciones encargadas de las limpiezas y mantenimientos de zonas en donde se deposite el agua. Sobre todo en los depósitos comunales que surten de agua a comunidades enteras. Siempre se debe estar al tanto de las condiciones en las cuales el agua es tratada y las desinfecciones que deben procurar hacerse a menudo.

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