Las infusiones para bajar la tensión alta son complementarias y ayudan a su tratamiento con éxito. La hipertensión es una de las enfermedades de más prevalencia en el mundo, y corresponde a la elevación de las cifras tensionales. Para que se desarrolle hipertensión arterial bastan unos cuantos factores de riesgo combinados con la tendencia hereditaria. El tener unos padres, hermanos o abuelos hipertensos puede ser clave para desarrollar a futuro la enfermedad. Y si se suman tabaquismo, edad, colesterol elevado, sedentarismo, estrés y obesidad, es alta la incidencia de padecerla.
Otras patologías pueden desarrollar hipertensión como la estenosis o estrechamiento de arterias renales y es más común en el diagnóstico de hipertensos jóvenes. La hipertensión puede presentarse sin síntomas y ser mucho más difícil su diagnóstico, o ser tardío con el riesgo que implica. En otras circunstancias los pacientes refieren cefaleas, mareos, taquicardias, visión borrosa, calor excesivo en cara, cuello y astenia o cansancio.
Después de los cuarenta años se manifiesta con más frecuencia, y en mujeres en etapa post menopaúsica por los cambios hormonales. Lo más temido de la hipertensión en sí, son las complicaciones que le acompañan luego de muchos años de padecimiento. O pueden ser apenas las primeras manifestaciones si lleva tiempo no diagnosticada ni tratada. Por ejemplo, infartos, accidentes cerebro vasculares e insuficiencia renal entre otros. En este espacio recomendaremos infusiones para bajar la tensión alta.
El té verde baja la tensión alta
Una de las bebidas más milenarias y usadas a lo largo de los siglos ha sido el té verde. Su alto contenido de antioxidantes la ha hecho muy popular, además contiene polifenoles y flavonoides que la convierten en un aliado excelente. Por ello se considera importante entre las infusiones para bajar la tensión alta.
Posee también catequinas que elevan el rendimiento de la capacidad cardiovascular, y disuelven coágulos circulantes, proveyendo buena circulación. Previene infartos y accidentes cerebrales, y además actúa sobre el índice de colesterol disminuyendo sus valores. Con hervir agua y colocar unas hojitas de té verde, tendremos una bebida muy agradable y medicinal. El té verde es perfecto para bajar la tensión alta.
Infusión de apio
Entre las infusiones para bajar la tensión alta, esta la de apio. El apio denominado también apio España o celery es un vegetal verde maravilloso, con múltiples propiedades para la salud. Como bajar la tensión arterial, reducir grasas en sangre, triglicéridos y colesterol, limpiar los riñones, tratar ácido úrico y artritis.
Es un vegetal muy hidratante y alto en fibra, tomado en jugos se le extrae los mayores beneficios, sobre todo a los tallos. En infusión igualmente, con solo hervir en agua y colarlo es suficiente para disfrutar sus virtudes. Lo ideal es no endulzarlo, ni agregar otros aditivos, pero hay quien lo combina con miel. Esta infusión de apio garantiza bajar la tensión alta.
Infusión de ajo
En el uso del ajo desde siglos, se adelantaron los griegos y los romanos. Por su enzima denominada alicina el ajo es un poderoso elemento usado en infusiones para bajar la tensión alta. Entre sus propiedades figuran el bajar el llamado colesterol malo, o LDL, reducir tensión arterial y fortalecer la fibra cardíaca.
El ajo también es conocido por ser antibacteriano y antiparasitario, aplicado en tratamientos cotidianos, bien sea puro machacado, en jugos, infusiones y sopas. Es muy popular en la dieta mediterránea, que además ha sido valorada como la dieta ideal para la salud cardiovascular. Ya que contiene antioxidantes, fibra, omega 3, y muchas vitaminas y minerales. Sin dudas, el ajo es un gran aliado para bajar la tensión alta.