Hematoma subungueal: causas y tratamiento

El hematoma subungueal se trata de una condición resultante de un suceso que se da por la exposición de las uñas de los pies cuando han sido sometidas a un golpe. En donde se acumula una cantidad considerable de sangre como producto de una hemorragia y hace que la uña posea un aspecto oscuro.

Es común que este tipo de traumatismo lo padezcan los corredores o maratonistas, porque se encuentran expuestos a la fricción con los zapatos. Igual sucede en las mujeres que tienden a usar zapatos de tacones bastante altos y que los usan diariamente. Este tipo de situación puede producir dolor y molestias. Además del color que tiende a ser un tanto desagradable en muchas personas.

Causas de un hematoma subungueal

La causa principal de un hematoma subungueal se produce cuando se manifiesta un hematoma en la zona que se encuentra debajo de la uña. A raíz de un golpe o el uso de un calzado que produzca fricción. Es común que se presente inflamación, dolor y estéticamente el color oscuro que presenta la uña. Así como cierta sensibilidad al tacto que es notable.

Se trata del rompimiento de vasos capilares del lecho ungueal y la sangre que se desprende se acumula y se coagula, formándose el hematoma. Al estar presionada allí es cuando se siente dolor en las zonas cercanas a la uña. Es característico que se rompa epidermis y se manifieste un drenaje espontaneo.

Cuando el golpe ha sido lo suficientemente grande, es sumamente importante realizar una revisión médica detallada del mismo. Así como la valoración por medio de una radiografía, para el descarte de algún tipo de fractura y visualizar las condiciones del dedo.

Tratamientos para el hematoma subungueal

Cuando se presenta un hematoma de este tipo es necesario la aplicación de varios tratamientos. Entre los que encontramos la perforación de la uña, mediante la aplicación de pequeñas aberturas. La cual debe realizarse en el periodo inicial con el objeto de que la lámina ungueal no se haya desprendido todavía.

Se puede realizar una exéresis parcial, la cual se trata de una erradicación del lecho ungueal. Retirando toda la porción que se encuentre en el exterior para evitar posibles complicaciones a posterior. Y que todo lo que se encuentre acumulado drene. Cuando la matriz de la uña se ve afectada es posible que la uña que vuelva a crecer no lo haga de la misma manera.

Cuando la uña no es tratada como es debido, pueden aparecer otras afecciones, como hongos en las uñas. Es preciso que luego de todos estos tratamientos se debe calzar zapatos mucho más cómodos y que no tiendan a rozar la zona de la uña. Del mismo modo es importante que se recorte la uña con el fin de que se evite desprendimientos accidentales.

¿Cómo podemos prevenirlo?

Al ser condiciones tan dolorosas y molestas, es preciso tomar previsiones para evitar que se presenten. En primer lugar es importante acudir al podólogo, con el fin de que realice las técnicas que se requieran para el drenaje del hematoma. Siempre basados en los procesos fiables para ello, el uso de las herramientas adecuadas y las técnicas precisas para evitar las infecciones a posterior.

Seguidamente, se deben realizar las revisiones periódicas para visualizar el avance de la uña, mediante curas que podrían efectuarse mensualmente alrededor de un año. Es un proceso largo y de cuidado. Al mismo tiempo es preciso tomar en consideración las maneras de prevenir la aparición de dichas lesiones, el uso de calzados adecuados y las medidas a tomar en consideración cuando ya se ha sufrido de una lesión de este tipo.

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