La dieta macrobiótica se encuentra basada en una tradición de la cocina oriental. Esta tradición busca encontrar una alimentación que busque el equilibrio del cuerpo y el espíritu.
El concepto de la dieta macrobiótica tiene sus inicios en Asia Oriental, principalmente en Japón. Esta tradición fue introducida en Europa Occidental en los años 30 por el filósofo George Ohsawa. Esta dieta también se basa en el principio de la dualidad entre el Yin y el Yang. Si todavía no conocen esta tradición, a continuación vamos a explicar cómo se debe aplicar la dieta macrobiótica.
Cereales integrales
En el equilibrio del Yin y el Yang, los cereales integrales son los más parecidos al cuerpo humano. Debido a esto, la dieta macrobiótica se basa en el uso de cereales completos e integrales en la alimentación. La cebada, trigo, maíz y centeno son los cereales que se deben consumir en esta dieta.
Es importante que, para mantener el equilibrio del cereal, éste debe ser integral y de origen orgánico. Para poder seguir una dieta macrobiótica, se debe evitar consumir cereales refinados. Esto se debe a que, cuando éste se refina, gana tóxicos y pierde su equilibro. Debido a esto, los cereales refinados pueden ser nocivos para la salud y el equilibrio corporal.
Vegetales
Lo primero que debemos tomar en cuenta es que la dieta macrobiótica no se basa de una alimentación vegetariana. Este régimen busca encontrar un equilibrio en los alimentos para encontrar una salud corporal y espiritual. Para esto, es necesario consumir cierta cantidad de vegetales en nuestra alimentación diaria. Pero, se pueden consumir ciertas carnes magras o pescados son aceptados, siempre y cuando estos otorguen equilibrio a nuestra salud.
Los vegetales en la dieta macrobiótica deben ser de origen de raíces o de hojas verdes. También podemos consumir ciertas hortalizas, como las berenjenas y el tomate. Debemos tomar en cuenta que en nuestro régimen alimenticio tratar de ingerir una pequeña porción de estos crudos. La mayor parte de estos vegetales deben ser cocinados en diferentes formas, ya sea al vapor, hervidos o salteados.
Legumbres es una parte importante de la dieta macrobiótica
El uso de las legumbres está derivado a la salud de nuestro sistema renal. Es por eso que son alimentos necesarios para constituir a una dieta macrobiótica. Una pequeña porción de nuestro régimen de alimentación debe estar constituido por lentejas y garbanzos.
Por otra parte, la dieta macrobiótica debe incluir algunos alimentos de origen asiáticos, sobre todo de Japón. Por ejemplo, el té de hoja verde y las algas marinas deben estar incluidas. También debemos tomar en cuenta los alimentos derivados de la soja, como el tofu, el miso y el tempeh. Estos alimentos son utilizados debido a que son una gran fuente de proteínas y vitaminas.
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