Para evitar infecciones y bacterias en los oídos, nuestro cuerpo produce una sustancia protectora conocida como cerumen. Esta cera también funciona como un lubricante natural para nuestro conducto auditivo. El problema es cuando se produce una acumulación excesiva de este cerumen, lo cual puede dañar nuestra audición.
Cuando el cerumen de nuestros oídos logra acumularse, se pueden producir diferentes tipos de problemas en los mismos. Debido a que el oído es sumamente importante para el equilibrio del cuerpo, muchas personas pueden experimentar ciertos síntomas importantes. Además de molestias en el oído, se pueden producir mareos, desorientación e incluso una pérdida de la audición. Para evitar estos problemas, vamos a conocer cómo limpiar el cerumen sin causarles daños a los oídos.
Índice
Utilizar solución salina
La solución salina es un remedio sumamente efectivo para eliminar el exceso de sustancias y evitar infecciones. Debido a esto, podemos utilizarla para eliminar la acumulación de cerumen en nuestros oídos de forma segura. Para esto, debemos utilizar una cucharadita de sal marina con una taza de agua destilada.
Esta mezcla podemos meterla en un microondas hasta que quede a temperatura cálida, pero no demasiado caliente. Luego, debemos utilizar un algodón para introducir algunas gotas de la solución salina en nuestro oído. Es importante mantener la cabeza inclinada durante el tiempo que la solución actúa. Finalmente, debemos inclinar la cabeza hacia el lado contrario para poder drenar la solución y los restos de cerumen.
Solución a base de aceites
Una alternativa sumamente efectiva para eliminar el exceso de cerumen de los oídos es con una solución a base de aceites. Este tratamiento es sumamente necesario en caso que existan tapones en dentro de nuestros oídos.
Lo que debemos hacer es aplicar esta mezcla en nuestros oídos durante un período de alrededor de 5 minutos. Durante este tiempo, los aceites lograrán disolver la acumulación de cerumen que se haya producido. Luego, debemos utilizar un algodón para limpiar los excesos de cera que hayan quedado dentro de la cavidad auditiva.
Evitar el uso de bastoncillos para limpiar el cerumen de los oídos
El uso de bastoncillos de algodón para limpiar los oídos es una práctica común, pero puede llegar a ser incorrecta. Además de causar irritación, pueden ser causantes de la producción excesiva de cerumen. A su vez, muchas personas no están conscientes que estos bastoncillos suelen empujar los residuos hacia el interior del oído. Cuando esto sucede, suelen producirse obstrucciones y se forman tapones en los oídos.
En caso que queramos utilizar bastoncillos para limpiar nuestros oídos, debe hacerse únicamente en la parte externa del mismo. Eso se puede utilizar para limpiar la entrada de la cavidad auditiva de ciertos residuos de cerumen. Pero, si queremos limpiar el interior del mismo, es necesario utilizar otros métodos más seguros y saludables.