Existen muchas plantas medicinales que ayudan a conservar una buena salud, pero sin dudas la angustifolia merece un capítulo aparte por sus grandes propiedades.

Es una hierba árabe muy famosa en el mundo de la herboristería, pertenece a la familia caesalpinaceae y florece en clima tropical. Principalmente se la encuentra en la India y los subcontinentes de la propia India. También es muy común en Egipto, Nubia y Sudán.

¿Qué es la cassia angustifolia?

El nombre de cassia hace referencia a más de 1.000 especies entre árboles, arbustos y plantas herbáceas de hojas paripinnadas y flores.

La angustifolia es muy particular porque su arbusto mide entre 60 a 120 centímetros de altura, y posee hojas compuestas de 4 a 7 pares de folíolos opuestos y vainas ovales.

Angustifolia

Las propiedades medicinales son dadas por las hojas y los frutos

Las propiedades medicinales son dadas por las hojas y los frutos. Las flores son amarillas, teniendo como fruto una legumbre. Los árabes introdujeron el arbusto en el siglo XI en Europa.

¿Cuáles son los beneficios de la angustifolia?

Se utiliza para tratar distintos tipos de dolencias, tales como:

  • El tratamiento del estreñimiento es su función más conocida
  • Se utiliza como un laxante y como purificador de la sangre
  • Para tratar enfermedades, tales como: anemia, bronquitis, disentería, fiebres y hemorroides.
  • Es útil en casos de ictericia, dermatitis, y heridas en la piel.
  • Es eficaz para el tratamiento de trastornos de la piel como el acné, la eczema y las espinillas.
  • Ayuda a perder peso, por sus propiedades diuréticas
  • Inflamación en el abdomen
  • Sirve para recuperar el apetito
  • Combate los calambres

¿Cuáles son los efectos secundarios?

Su consumo se recomienda bajo supervisión médica porque puede producir algunos efectos secundarios, cuando se la toma por un tiempo prolongado, tales como:

  • Malestar estomacal
  • Calambres
  • Diarreas
Angustifolia

se la suele encontrar en infusiones y comprimidos

Es importante destacar que su uso prolongado puede hacer que los intestinos dejen de funcionar de forma normal y causar dependencia a los laxantes.

Otro efecto secundario, por su uso prolongado, es que también puede cambiar la cantidad o el balance de algunos químicos en la sangre (electrolitos). Esto puede provocar trastornos de la función cardíaca, debilidad muscular, daño hepático y otros efectos nocivos.

¿Cualquier persona puede consumirla?

Por lo general en pequeñas dosis no tiene contraindicaciones aunque no es recomendable en personas: con dolor abdominal (diagnosticado o no diagnosticado), aquellas que padecen de bloqueo intestinal, enfermedad de Crohn, colitis ulcerativa, apendicitis, inflamación del estómago, prolapso anal o hemorroides.

Se toma de forma bastante fácil, porque las hojas o vainas pueden ser infundidas, pero la forma más común es tomar una preparación que se vende comercialmente.