El cáncer es un asesino silencioso. Así que te vamos a indicar cuáles son los síntomas de la leucemia para que puedas atacar esta enfermedad a tiempo. Al igual que casi todos los diferentes tipos de cáncer que existen en el mundo. La leucemia se presenta casi asintomáticamente salvo por algunos casos puntuales. Por lo que es vital ir al médico regularmente, tener una vida sana lejos de vicios, entre otros.
Por esta y otras muchas razones, los factores ambientales, genéticos (herencia) y hasta alimenticios inciden en la formación de cáncer en nuestro organismo. Es decir, tienes que estar atento de lo que haces y de lo que comes. Tener una vida completamente libre de algunos alimentos potencialmente peligrosos no te va a salvar de tener una enfermedad como el cáncer. Pero si embargo pueden reducirse sus factores de riesgo. Por esta razón, te invitamos a seguir leyendo los síntomas de la leucemia para detectarlos a tiempo.
¿Qué es la leucemia?
Es comúnmente conocida como cáncer en la sangre. La leucemia viene dada por la multiplicación de células cancerígenas en la sangre de manera desproporcionada, las cuales se pueden introducir en la médula espinal de la persona e impide que se produzcan células libres de cáncer. Además de la sangre, las células cancerígenas alojadas en la médula pueden dañar otros órganos. La leucemia produce descontroladamente glóbulos blancos que no están maduros.
Como todo en nuestro cuerpo viaja por el torrente sanguíneo. Las células cancerígenas de la sangre pueden alojarse en cualquier parte del cuerpo y en diferentes órganos de manera simultánea. Por lo que además de silenciosa, si la leucemia no se trata a tiempo, simplemente es mortal.
Síntomas de la leucemia
Esta enfermedad no tiene manifestaciones visibles en el cuerpo. Por lo que se detecta con diversos exámenes y en algunos casos, con síntomas meramente puntuales. La leucemia se manifiesta cuando en los exámenes de sangre existen recuentos sanguíneos muy bajos. Esto viene acompañado por síntomas externos como mareos y cansancio inexplicable. Es decir, cuando la persona se siente cansada sin experimentar actividad física, debilidad general, sangrado constante a través de la nariz o en las encías.
Otros síntomas que experimentan las personas con leucemia son infecciones muy recurrentes o que tardan demasiado tiempo en curarse. Esto se debe a que la médula ósea está creando glóbulos blancos inmaduros que no pueden combatir las infecciones de manera eficaz. En algunos casos las personas experimentan fiebres recurrentes y presentan moretones en la piel después de sufrir golpes leves. Además, síntomas no tan comunes como pérdida inexplicable de peso, sudores fríos en las noches y pérdida súbita del apetito.
Como se ha escrito anteriormente, las células cancerígenas viajan a través del torrente sanguíneo y se pueden acumular en órganos como el bazo y el hígado. Con el consecuente aumento de tamaño del mismo. Esto se puede apreciar cuando se tiene una súbita inflamación del abdomen y cuando se tiene sensación de llenura inclusive cuando se comen pocas cantidades de alimentos. En algunos casos, la leucemia puede alojarse en los diversos ganglios linfáticos de nuestro cuerpo (no confundir con linfomas).
En general, cuando la leucemia se propaga a diferentes órganos y sistemas de nuestro cuerpo. El médico tratante puede detectar las anomalías y el malfuncionamiento de los mismos. Ya sean en órganos blandos, así como también en huesos y articulaciones.
Diagnóstico de la leucemia
Como se ha podido apreciar, si una persona presenta síntomas de la leucemia como los descritos anteriormente, no significa que la padezca. Para tener la certeza de que se trata de este tipo de cáncer. Son necesarios una serie de pruebas médicas que darán con la enfermedad de manera precisa. Lo primero que su médico hará es hacerle un examen físico exhaustivo. Si usted ha presentado síntomas de manera recurrente y a lo largo de mucho tiempo. Después procederá a diversos exámenes.
El primero es el examen de sangre a través del cual se podrá ver el recuento total de su sangre. Si el recuento de sangre desvela que el paciente tiene muchos glóbulos blancos inmaduros, está en presencia de leucemia. También se hace una biopsia de médula ósea para que se descarte de una vez si se tiene leucemia o no.
