Remedios para el absceso dental o flemón

Un absceso dental, también conocido como flemón, es una de las infecciones bucales más frecuentes. Se produce debido a la acumulación de material infectado y bacterias que se produce cerca de los dientes. Cuando esto sucede, la zona afectada puede inflamarse y causar un dolor sumamente severo.

El absceso dental puede ser causado por traumatismos o enfermedades periodontales que afecten los tejidos que rodean al diente. También puede ser producido por una deficiencia en la higiene bucal de la persona. Por suerte, hoy en día existen muchos remedios efectivos para tratar esta afección. A continuación, hablaremos de algunos de estos tratamientos.

Medicamentos y remedios caseros

Para poder controlar los síntomas del absceso dental, el dentista puede recetar diferentes medicamentos. Por una parte, algunos analgésicos de venta libre son de gran utilidad para reducir las molestias ocasionadas por un flemón. También se pueden utilizar antinflamatorios para reducir la hinchazón en la zona afectada.

En caso que la infección producida se prolongue más allá de una pequeña zona, es posible que se requieran antibióticos. Estos medicamentos pueden ayudar a reducir la infección que haya producido el absceso dental. Al mismo tiempo, puede ayudar a reducir la cantidad de pus acumulado.

Por otra parte, existe una gran cantidad de remedios caseros que pueden facilitar el drenaje del absceso dental. Por ejemplo, es posible utilizar una solución salina para evitar que la infección se prolongue. Para esto, se deben realizar gárgaras con una mezcla de agua tibia y sal. Esto se puede realizar un par de veces al día para mejorar los síntomas de esta infección.

Drenaje del absceso dental, endodoncia y extracción de la pieza

Uno de los procedimientos más seguros y rápidos para tratar un absceso dental es el drenaje del pus acumulado. Para esto, se debe realizar una pequeña incisión en la zona afectada, para poder extraer el material infeccioso. A su vez, el dentista puede lavar la zona afectada con una solución salina luego de haber realizado el drenaje.

También se puede realizar una endodoncia, en la cual se podrá eliminar el absceso dental sin comprometer al diente afectado. Para esto, se debe hacer una pequeña incisión en la pieza afectada y drenar la pulpa central de la misma. Posteriormente, se debe llenar y sellar la cavidad de la pieza con un material inerte. Con el cuidado necesario, es posible que dicha pieza no vuelva a ser afectada por una infección.

En el caso que el diente no pueda ser rescatado, se deberá realizar una extracción de dicha pieza afectada. Luego de la extracción, el dentista procederá a realizar el drenaje correspondiente del absceso dental, para poder eliminar la infección. Posteriormente, se puede colocar un implante dental en el lugar de la pieza extraída.

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