La fibromialgia o fatiga crónica figura como enfermedad muscular de causa desconocida que presenta múltiples síntomas, entre ellos la rigidez matutina. Puede convivir con otras enfermedades reumáticas de corte inmunológico en su origen, de ahí deriva el difícil diagnóstico. A veces los pacientes afectados pasan años con dolores generalizados, fatiga, depresión, insomnio y falta de fuerza muscular sin sospecharla. Uno de los criterios mayores para el diagnóstico clínico de la artritis reumatoide lo constituye la rigidez matutina.
Si se padece de alguna patología articular crónica como artritis o lupus, se es más propenso a la fibromialgia. Por la rigidez vista en la fibromialgia, los afectados no duermen o se levantan igualmente cansados, involucrándose varios grupos musculares. Ellos pueden comprender músculos de espalda, caderas, brazos, cuello y hombros, encontrándose puntos específicos de dolor que se catalogan de típicos. Se localizan cuatro puntos en cuello, hombros y espalda alta, cuatro puntos más entre la región lumbar y las caderas. Dos puntos en cara interna de rodillas y dos puntos en antebrazos, por su cara interna. A continuación, consejos para la rigidez matutina por fibromialgia.
Índice
Ejercicios de estiramiento
La rigidez matutina en la fibromialgia está determinada por algunos autores como resultado del insomnio o mal dormir. Otras razones se esgrimen por afectación de los neurotransmisores cerebrales con respuestas exageradas al dolor, reconocidas así por el cerebro. También influyen los procesos inflamatorios generales musculoesqueléticos que afectan en la enfermedad. Son recomendados los ejercicios de estiramiento al despertar, incluso sin abandonar la cama.
Comenzar poco a poco en posición horizontal, estirando brazos, piernas, arqueando la espalda, elevando pelvis y girando el cuello. Aprovechando a su vez el calor natural del cuerpo a esa hora, para que estén más suaves las articulaciones y músculos. Luego de abandonar el lecho, comenzar por flexiones al piso hasta donde tolere la condición de elasticidad del paciente. Hechos con frecuencia los ejercicios matutinos mejoran la elasticidad de quien padece fibromialgia.
Mantener un peso estable
El mantener un peso estable para evitar la rigidez matutina, tiene como objetivo que las articulaciones y musculatura no soporten mucho peso corporal. Debido a que provoca inflamación, carencia de fuerza muscular e impotencia funcional para realizar ciertas tareas. En la medida que el peso sea adecuado a la talla, o incluso por debajo de ella, se beneficiara el paciente. Sintiéndose más capaz para desempeñarse a diario.
Ducharse con agua caliente mejora la rigidez matutina
Tanto beber infusiones como darse una ducha caliente, favorecen la relajación muscular en los pacientes que padecen fibromialgia y calman el dolor. Se deben evitar ambientes demasiado húmedos o fríos. Hacer terapias contra el estrés, recibir analgésicos adecuados y consumir mucha agua.
Por otra parte, tratar de dormir en buena postura mejorara el flujo sanguíneo a los tejidos. Aparte de todos los consejos emitidos, no cabe duda que un buen soporte familiar ayuda en gran medida a la sobrellevar la fibromialgia. Un paciente que se siente comprendido y apoyado, mejorará su autoestima, depresión y ansiedad con respecto a sus síntomas y tratamiento.