Dermoabrasión: Rejuvenecimiento de la piel

La dermoabrasión, es una técnica de exfoliación de la piel que se realiza a través de un dispositivo que va rotando sobre la misma. Después de este procedimiento, la piel se regenera con un aspecto más terso y rejuvenecido. La dermoabrasión disminuye las líneas de expresión y reduce las marcas como, por ejemplo, aquellas cicatrices provocadas por el acné. Para realizar esta técnica, es necesario en algunos casos aplicar anestesia sobre la piel. Durante varios días la piel permanecerá sensible y con un aspecto rosado que demorará varios meses en desaparecer. Conozcamos más detalles.

¿Por qué se realiza la dermoabrasión?

Este procedimiento, se utiliza comúnmente para eliminar cicatrices provocadas por el acné, lesiones o algunas cirugías. También es solicitada para reducir líneas de expresión, en especial aquellas que aparecen alrededor de la boca. Igualmente, la dermoabrasión se usa para disminuir las manchas que suelen aparecer al avanzar la edad o por la exposición al sol. Otras razones por las cuales las personas suelen solicitar este tipo de procedimientos, es la eliminación de tatuajes y lesiones cutáneas que pudieran considerarse potencialmente cancerosas.

Descripción del procedimiento

Este procedimiento suele llevarse a cabo de tres maneras diferentes, de acuerdo a la necesidad de quien lo requiera. La dermoabrasión química, la lumínica y, por último, la mecánica. El procedimiento comienza desinfectando la piel y se aplica anestesia en caso de tratamientos profundos. Se lleva a cabo el procedimiento dermoabrasador, que puede tratarse desde una lija sencilla hasta dispositivos sofisticados como tornos de diamante.

Finalmente se aplica una crema para la reparación de la piel, en los tratamientos superficiales, y en los profundos se utilizan pomadas cicatrizantes. Los resultados de estos procedimientos pueden apreciarse de manera inmediata y permiten lucir un rostro más lozano con una piel rejuvenecida.

Beneficios

La dermoabrasión ofrece múltiples beneficios, como los son el afinamiento de la queratosis o zonas engrosadas de la piel. También, permite la eliminación de las células muertas de los diferentes tejidos de la piel del rostro. Asimismo, por medio de este procedimiento pueden corregirse algunas irregularidades cutáneas, reducir cicatrices y eliminar tatuajes. De la misma forma, pueden atenuarse las secuelas del acné así como favorecer la extracción de comedones o puntos negros. Finalmente, la dermoabrasión estimula de generación de colágeno y elastina que produce la piel de forma natural.

Riesgos

Aunque los profesionales aseguran los resultados eficaces de este procedimiento, la dermoabrasión no está exenta de riesgos. En primer lugar, de acuerdo al problema presentado, es posible que se requiera la aplicación de anestesia. Se deben tener en cuenta los riesgos que esto pudiera generar, de acuerdo a la condición física del paciente. De igual manera, existen los riesgos de contraer una infección en la piel o alguna reacción a los químicos utilizados. Sin embargo, esto es en menor grado. Para evitar inconvenientes mayores que pudieran poner en riesgo la salud, es recomendable acudir a un profesional. Mejor aún si es reconocido, que ofrezca garantías y de a conocer el proceso en su totalidad.

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