Se conoce como trastorno de ensoñación o ensoñación excesiva, una condición de las personas que las lleva a pensar constantemente en sus fantasías. Este trastorno los retrae de alguna manera de sus actividades cotidianas e interfiere en su vida social, intelectual, de trabajo etc. Los individuos que presentan el trastorno de ensoñación, alimentan la situación con muchas circunstancias creadas por sí mismos. Hoy día con el auge de las redes sociales, es común ver grupos que se dedican a compartir estas vivencias fantasiosas y comentarlas.

La ensoñación ha sido suficientemente estudiada por la psicología y sugiere que las personas que la presentan tienen alguna privación. Podrían además tener déficits de atención, conductas evitativas y ser proclives a trastornos psíquicos en general. Otro enfoque es que son personas más bien muy inteligentes y creativas en lo que desean desarrollar y les contribuye esa condición.

Desde la infancia o adolescencia puede que se manifieste en su totalidad, para sustituir carencias. Por ejemplo, el muy común amigo imaginario de los niños, ese ser que los acompaña en su mente nada más. Que posee nombre, características y comunicación con ellos, y es de repente el sustituto del hermanito perfecto que no poseen y necesitan. También se ha ventilado que los pacientes con trastorno de ensoñación, pueden compartir algunas características de la adicción a ciertas conductas. Por ejemplo, las de los trastornos obsesivos compulsivos, los trastornos psicóticos y el déficit de atención entre otras.

Síntomas

Trastorno por ensoñación

Los síntomas de la ensoñación corresponden a la abstracción de la persona en sus pensamientos y fantasías. Esto va desmejorando sus relaciones interpersonales, trabajo, actividad vocacional y somete a su vez al individuo a un estrés extraordinario.

Al distraerse de manera recurrente, el individuo cambia la dinámica con los demás y su interacción con otros por las ensoñaciones y fantasías. Esto lo va cavilando en su mente y hacia su interior, introspectivamente. Los que padecen del trastorno de ensoñación se sienten con dependencia psicológica y compulsiva a abstraerse en su mundo fantástico. Pudiendo ocurrirle por horas o días, y esto le va llevando al no cumplimento de sus rutinas cotidianas y sus responsabilidades.

Otros síntomas son el hecho de que el paciente reconoce que presenta ensoñaciones desde la infancia. Realiza rituales dirigidos a la misma, bien sea que, durante ello, ejecute una caminata, canción, o un lugar en particular de la casa.

El individuo puede relacionar la ensoñación a su vez con eventos traumáticos durante su infancia o adolescencia, como maltrato o soledad. Refugiándose en esta condición para superarlos, y está consciente de que no le permite llevar una vida normal, que interfiere con ella.

Causas del trastorno por ensoñación

Trastorno por ensoñación

En realidad, las causas del trastorno de ensoñación, no serían otras que las de una compensación ante los elementos estresores de la sociedad. Y además del entorno del paciente, procurando entonces una validación propia, reconocimiento de sus propias capacidades y valores. Por eso está relacionada con apoyo emocional, competencia y aceptación social por parte del propio paciente. La ensoñación entonces se comporta de una manera gratificante o de premio para enfrentar las situaciones de supresión del ambiente. Acomodándose para enfrentarlas.

Tratamiento

Trastorno por ensoñación

El tratamiento consiste en psicoterapia e intervenciones cognitivo conductuales, así como la práctica de la meditación. Hay estudios realizados con pacientes a lo largo de 6 meses aproximadamente y a los que se les hizo seguimiento. En ellos se concluyó que al menos en un cincuenta por ciento mejoraron las personas sometidas al tratamiento, reduciendo las ensoñaciones. Estos pacientes fueron evaluados periódicamente y mejoraron sustancialmente su adaptación social y su vida laboral en general.