Los acrocordones son pequeños pedículos carnosos que aparecen espontáneamente en la piel, denominados también neoplasias benignas. Son comunes sobre todo en áreas de roce, en cuello, axilas, pecho, ingle  etc., completamente inofensivos, no crecen y son indoloros. Además pueden verse en los parpados y alrededor de ellos con regularidad. Se les  llama también papilomas cutáneos, y solo si el roce es excesivo con la superficie donde se localizan, pueden causar irritaciones.

Estas estructuras no merecen tratamiento especial, pero si el paciente considera antiestética o molesta la lesión en cuestión, puede ser extraída quirúrgicamente. Son en formas de bultos o con formas alargadas de piel, de colores marrón, blanquecinos o del color de la piel misma. Tienen contextura suave y corta talla, o pedúnculos, aunque se han encontrado acrocordones más largos de piel entre pliegues. Son vistos además con frecuencia en pacientes con hiperinsulinismo, como un estigma de la enfermedad, junto con la acantosis nigricans en el cuello.

¿Por qué aparecen los acrocordones?

Acrocordones

Aunque se especula que la causa de los acrocordones es desconocida, hay una clara génesis en el roce de estructuras como los pliegues. Dando lugar a pedículos de piel variados en tamaño, color y forma.

Por otra parte, es común verlos en personas obesas, diabéticos, pre diabéticos o hiperinsulinémicos como estigma de la enfermedad y en embarazadas. También se asocian al síndrome de ovario poliquístico y a la acromegalia, en cuyo caso pueden estar en el 46% de los pacientes. Por lo anterior se puede deducir que tienen una asociación a trastornos  endocrinos  muy marcada. Se dice además que, si se presentan en número de cinco sobre la piel, constituye un marcador para padecer de pólipos colónicos adenomatosos. A continuación, unas recomendaciones para deshacernos de los acrocordones.

Cómo eliminarlos

Acrocordones

No se deben confundir los acrocordones con verrugas, ya que no lo son, ni son contagiosos como ellas tampoco. Las verrugas poseen un origen viral como el papilomavirus. Los acrocordones se suelen ver con más especificidad en hombres que en mujeres, según la prevalencia conocida y sobre los 40 años.

Acrocordones

Un especialista en cirugía o dermatología debe valorarlos antes de extirparlos. Los acrocordones pueden tener claras indicaciones para eliminarlos aparte de la estética, y es que, se produzcan en ellos, torsiones, estrangulamiento o sangramiento. Los métodos más comunes para eliminarlos son:

  • Criocirugía o congelamiento de la pieza de piel por medio de nitrógeno líquido y un aparato que lo instila. Ocurriendo luego, congelamiento y posterior descamación local de la piel, quedando completamente cicatrizada en un tiempo relativo.
  • Electrocoagulación, aplicando calor local en la zona con el electrocauterio, cicatriza de inmediato y retira la lesión.
  • Cirugía tradicional con bisturí, tomando el acrocordón a retirar lo más cercano a la base para hacer el corte.
  • Laser terapia como su nombre lo indica es dirigiendo un rayo láser, con las protecciones debidas del operador y el paciente. Ello para no quemar otras áreas y eliminar los acrocordones requeridos.
  • El método casero, consiste en amarrar con pericia con un hilo delgado el pedúnculo o base del acrocordón. Con la finalidad de que no le llegue irrigación sanguínea al mismo. Y hacerle nudos al hilo para que así se caiga sola la lesión en el curso de unos días.