Los calambres son síntomas muy molestos que todos hemos sufrido alguna vez, suelen presentarse en piernas y brazos. Los calambres en las piernas están relacionados con muchas actividades, padecimientos e incluso enfermedades que podemos sufrir. En ocasiones se presentan de forma unilateral y otras de forma bilateral. Es importante que prestemos atención a la frecuencia con que sufrimos calambres, y por cuánto tiempo los sentimos.
Los episodios de calambres comúnmente se extienden durante unos pocos minutos, y pueden disiparse moviendo con cuidado la extremidad afectada. Sin embargo, hay ocasiones en que son más insistentes y dolorosos, en estos casos debemos acudir al médico. Es de vital importancia prestar atención a este problema para prevenir mayores consecuencias. A continuación, hablaremos más a fondo de las causas de los calambres de piernas y cómo eliminarlos.
Causas
Los calambres en las piernas son ocurrencias bastante comunes entre hombres y mujeres. Sin embargo, las mujeres suelen sufrir más de este molesto síntoma, debido a los cambios hormonales que presentan. Las mujeres pueden sufrir muchos calambres durante el síndrome premenstrual o incluso durante la menstruación. Debido a que los vasos sanguíneos se inflaman y producen un dolor muy incómodo a lo largo de las piernas. Esto también sucede durante el embarazo por los cambios hormonales, o por el aumento de peso. El incremento del peso puede producir mayor impacto en las piernas a la hora de sostener el cuerpo. Es por ello que las personas presentan calambres ante este cambio drástico.
Algunas personas sufren de calambres de piernas cuando retienen líquidos en exceso, y sus extremidades se inflaman. La retención de líquidos sucede cuando los riñones no drenan por completo las toxinas y las retienen en las piernas y pies. Los calambres en las piernas también están relacionados con la acumulación del ácido úrico. El ácido úrico está presente en ciertos tipos de comidas, como las carnes rojas y los vinos tintos. El ácido úrico suele acumularse en las articulaciones, causando dolores reumáticos, aunque también puede extenderse en las piernas.
Las personas que sufren de várices y problemas circulatorios presentan calambres en las piernas. Los vasos sanguíneos de las piernas pueden estrecharse hasta el punto en que la sangre pasa con mucha dificultad. Esta circulación deficiente produce dolores y calambres en las piernas. Además de la circulación, las piernas necesitan movimiento diario para evitar el estancamiento de sangre y fluidos. Algunos calambres de piernas son causados por la falta de potasio y ciertas vitaminas necesarias para el organismo.
Recomendaciones para estos calambres
Si sufres de calambres de piernas nocturnos, lo más probable es que se trate de una deficiencia de potasio. Para evitar este molesto síntoma, te recomendamos acudir a tu médico para que te recete la cantidad de potasio necesaria. Este tipo de padecimientos también se relaciona con la deshidratación y el consumo pobre de líquidos. Es necesario que consumas suficiente agua diaria y que camines al menos quince minutos al día. Movilizar las piernas te permitirá mantener una circulación adecuada.
Si tus calambres de piernas se atribuyen a cambios hormonales, te recomendamos elevar las piernas durante unos minutos al día. Esto distribuirá mejor el flujo de sangre y eliminará el dolor molesto que puedes sentir. Debe aplicarse lo mismo para las personas con problemas circulatorios, como las várices. Para ello también será de mucho alivio realizar masajes suaves con las manos de forma ascendente. Esto ayudará a reducir el dolor y encausar la circulación hacia arriba. Si tienes al ácido úrico alto y sufres de gota, lleva una dieta cuidadosa y elimina el ácido úrico. Si los calambres se hacen muy reiterados, debes acudir a tu médico de cabecera para un diagnóstico y tratamiento certero.