Las cabinas de rayos UVA: consejos y riesgos, se trata de un tratamiento que es usado en la mayoría de las veces. Por mujeres jóvenes, pero se debe tener sumo cuidado al uso de las mismas. Ya que han presentado ciertas contraindicaciones que son para tomar en cuenta. A pesar de que los especialistas determinan que estas cabinas logran impedir que pasen las radiaciones dañinas. En donde solo se usan aquellas radiaciones que logran dar a la piel el aspecto bronceado que tanto se busca.

A pesar de toda esta información se debe tomar en cuenta que estos rayos usados para el bronceado. Con el tiempo puede llegar a envejecer la piel, e incluso ocasionar lesiones pre cancerosas. Es así como conoceremos en adelante cual es la forma más aconsejable de usar estas cabinas. Así como conocer específicamente sus riesgos. ¡Sigamos leyendo!

Consejos para usar estas cabinas

Lo que primero se debe tomar en cuenta al usar estas cabinas es que se debe cumplir con toda una serie de normativas. Que se encuentran establecidas dentro de los parámetros de uso de este tipo de componentes. Como aquellas personas que son menores de edad, o que tengan piel muy clara. Así como los que tengan disposición a manchas o muchas pecas.

Cabinas de rayos UVA: consejos y riesgos

Cabinas de rayos UVA: consejos y riesgos

También se debe evitar el uso en mujeres embarazadas así como en personas que hayan padecido cáncer de piel. Al tomar en cuenta estos detalles es preciso que el uso de estas cabinas sea regulado. Y es así como encontramos sesiones breves de cinco a diez minutos. Se deben usar gafas homologadas. Además de hacer descansos de 48 a 72 horas entre cada una de las sesiones.

Cuando la persona se dispone a viajar a la playa se debe tener presente que no debe hacer uso de las cabinas de bronceado. De igual manera es importante utilizar cremas protectoras en contra de los rayos solares UV. Sobre todo cuando se va a la playa. Es importante conocer que existen tanto beneficios como contraindicaciones en el uso de estas cabinas. Y tenerlas presentes además.

Beneficios de los rayos UVA

Así como los rayos UVA pueden resultar peligrosos también estos pueden brindar ciertos beneficios al organismo. Siempre y cuando estos se usan de forma prudencial, ya que es la exposición prologada la que mayores daños genera.  Haciéndolo de forma moderada, pueden resultar beneficiosos.

Entre los diferentes beneficios está el fortalecer  los huesos y los músculos, estos pueden prevenir la osteoporosis. Es un fortalecedor del sistema inmunológico. Así como puede brindar la posibilidad de presentar un mejor estado de ánimo. Es bueno para disminuir los dolores del reumatismo y de la artritis. Es beneficioso en los casos de psoriasis y acné, ya que los combate eficientemente.

Y puede prevenir un padecimiento como el raquitismo en los niños. Y finalmente es una fuente natural de Vitamina D. Una de las fuentes vitales para que el organismo metabolice el calcio. Además de los beneficios que en si posee como la obtención de bronceados rápidos y uniformes. Y las cabinas proporcionan la capacidad de que la piel no se exponga arbitrariamente al sol.

Cabinas de rayos UVA consejos y riesgos

Cabinas de rayos UVA consejos y riesgos

Es así como se evitan daños a la piel. Y se logran los resultados que se quieren. Cuando se desea obtener una piel bronceada de forma pareja, se debe asegurar no hacer más sesiones de las recomendadas. Y luego usar cremas humectantes para alimentar la piel luego de haber estado expuesta a estos rayos.

Riesgo de uso en los rayos UVA

La exposición a estos rayos en algunos casos está contraindicada. Ya que estos pueden ocasionar daños cuando se expone por tiempos prologados. Puede dañar directamente la elasticidad en la piel. Lo que conlleva a lesiones que pueden convertirse en lesiones cancerígenas.

La exposición a estos rayos en personas menores es potencialmente dañina. Ya que existen normativas que deben ser consideradas, las cuales hemos mencionado con anterioridad. Las cabinas de rayos UVA: consejos y riesgos, así como aportan beneficios también pueden brindar daños. Y si no se cuida la exposición pueden ser severos, muy a pesar de que sean inofensivos.