Mantener la espalda recta es algo muy importante para la salud. Especialmente para las vértebras y los músculos que se encuentran a su alrededor. Hoy en día, las personas sufren cada vez más de malas posturas, sobre todo por el auge de la tecnología. Los trabajos pesados o los trabajos ante una computadora, conllevan a malas posturas, que terminan siendo dañinas para la salud.

Mantener una espalda recta no es tan difícil como muchos lo piensan, sólo hace falta un poco de esfuerzo. Lo más importante será tomar consciencia de la posición del cuerpo en el espacio que nos rodea. Comenzando por esto, podremos obtener una espalda recta y un mejor porte. Esto no sólo beneficiará nuestra salud, sino que nos hará ver más delgados y esbeltos. A continuación, te enseñaremos 6 ejercicios para mantener la espalda recta.

1.      Caminar con un libro en tu cabeza

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Esta técnica se utilizaba en la antigüedad para enseñar a las señoritas de clase alta a tener un buen porte. Sin embargo, hoy en día está muy vigente y es efectiva para mantener la espalda recta. Para aplicar el ejercicio del libro en la cabeza, sólo necesitarás un libro grande y no muy pesado. Coloca dicho libro sobre tu cabeza y camina con la espalda recta y los hombros hacia atrás. No debes ver hacia el suelo mientras caminas, procura mantener el equilibrio del libro.

2.    Encintar tu espalda

Encintar la espalda es un buen ejercicio para mantener una buena postura y espalda recta. Para comenzar, necesitarás la ayuda de alguien. Asume una postura recta antes de colocar la cinta en forma de “X” en tu espalda. Desde tu hombro izquierdo cruzando a tu cadera derecha y viceversa. Puede ser una cinta normal que amarres al finalizar, o una cinta adhesiva especial para aliviar dolores musculares.

3.    Mírate en el espejo

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Vernos al espejo es un gran modo de notar cómo nos ubicamos en el espacio. Al observarnos, tenemos una mejor idea de qué malas posturas estamos realizando y cómo podemos cambiarlas. Procura tener espejos en tu habitación, desde donde puedas verte mientras estás sentado, parado o reclinado en la cama. Con esta técnica, puedes comenzar a aplicar correcciones a tu postura para una espalda recta.

4.    Descansa la espalda

Una de las mayores causas de las malas posturas, son las lesiones de espalda. Esto sucede porque tendemos a adaptar nuestra postura de acuerdo a lo que nos produzca menos dolor. Como consecuencia, sufrimos de muchas contracturas musculares en la espalda, cuello y hombros. Esto puede evitarse en gran medida adoptando una postura correcta, pero también descansando lo suficiente.  Cuando regreses a casa del trabajo, recuéstate y realiza tareas suaves para no lastimar tu espalda.

5.    Revisa tus pantorrillas

Las pantorrillas son la parte del cuerpo que más debe cargar el peso, sin embargo, a veces usamos nuestro dorso. Para asegurarte de que tus pantorrillas sean las que sostienen el peso, debes fijarte en tu modo de caminar. Apoya tus pies y siente la acción de los músculos de las pantorrillas en vez de los de la espalda. También puedes sentarte con las piernas extendidas en el suelo y doblar tu torso hacia tus pies estirando las manos. Este ejercicio es bueno para aliviar contracturas de espalda y ejercitar los abdominales, además de las pantorrillas.

6.    Imagina que te sostiene una cuerda

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La columna vertebral describe un eje vertical desde la base del cráneo hasta el coxis. Es la encargada de mantener el cuerpo recto y soportar el peso del cráneo y el cerebro. Un buen ejercicio para mantener tu espalda recta, es imaginar que te sostiene una cuerda. Piensa en tu cuerpo como en el de una marioneta que está siendo manejada. Visualiza que desde tu cabeza a tu coxis existe una cuerda vertical que debe estar siempre tensa. Con esto podrás corregir tu postura siempre que sientas que la cuerda se afloja.